
El denominado acuerdo de confidencialidad o no divulgación surgen como respuesta a la alta competitividad y la desequilibrante necesidad de innovación que impone el entorno económico del mundo de hoy.
La idea detrás de ellos es proteger aquella información sensible que pueda ser utilizada de forma inadecuada por terceros para su beneficio. No es tanto prohibir su uso, sino más bien evitar que la información sea divulgada sin consentimiento del propietario. Ni tampoco utilizada en beneficio ajeno.
Pueden consistir en contratos. Sin embargo, generalmente son cláusulas o grupo de cláusulas que se encuentran enmarcadas en relaciones jurídicas de colaboración, intercambio o negociación. Por lo que pueden recaer sobre modelos de negocio, desarrollo de tecnologías, planos o diseños, bases de datos, recetas, entre otros.
Hay que recalcar que no necesariamente va a recaer sobre cosas que se encuentren registradas. También lo pueden ser sobre información o asuntos considerados sensibles. Sin embargo, hay que tener en cuenta que dicha información debe revestir el carácter de reservada, ser tratada con medidas adecuadas de manipulación, y no ser de fácil acceso. Incluso, para personas que puedan estar vinculadas en su uso o implementación.
¿Qué es un contrato de confidencialidad?
También se pueden adoptar la forma de contratos y son de naturaleza innominada. En otras palabras no se encuentran específicamente regulados en la ley. Por lo tanto, su fundamento se encuentra, al igual que con las estipulaciones, circunscrito en la autonomía de la voluntad y el principio de confidencialidad al cual todos tenemos derecho.
¿Acuerdo de confidencialidad y las relaciones laborales?
Son muy frecuentes. Al punto de ser casi la regla general encontrarse con este tipo de estipulaciones. Con todo, no han estado exentas de controversias. En efecto se ha discutido su procedencia en el contexto de las relaciones laborales. No obstante, la Dirección del Trabajo se ha pronunciado de forma afirmativa, inclusive para después de terminada la relación laboral, siempre y cuando se sean:
- Idóneas
- Necesarias
- Proporcionales
Agregar que, si se configuran con posterioridad de la celebración del contrato de trabajo. Lo que se hace es introducirlas a través anexos al mismo.
¿Cómo se formula un contrato de confidencialidad y no divulgación?
Es necesario establecer quiénes son las partes que firmarán el contrato o acuerdo de confidencialidad. Esto es muy importante puesto que los alcances del acuerdo van a estar subordinados a quienes hayan concurrido a su celebración. Si, por ejemplo, te encuentras en el medio de intensas negociaciones y debes proporcionar información sensible sobre tu negocio a inversionistas, es necesario que todos formen parte del acuerdo. e
Es esencial dejar claramente estipulado el plazo de duración que vinculara a las partes y ser específico con el tema sobre el cual va a recaer.
Si tienes dudas respecto a este tipo de estipulaciones, en Legal Prisma podemos asesorarte en todos sus pormenores.